Tablita Simos

Tauriel llegó al barrio intentando abrirse una clinica veterinaria. Lo mas productivo era vender cuadros y dado que siempre le gustaron las peliculas de templos y cosas de explorar se le ocurrió viajar a Selvadorada donde encontró su vocación como arqueologa. En el barrio se reencontró con un amigo de su infancia y aunque parezca extraño, acabó enamorada de su insufrible padre. Este, un snob de cuidado, la corespondió y se fue a vivir con ella (para asegurarse de que ella no estaba con el por su dinero). Los años han pasado. Ahora tienen un hijo, el es muy anciano ya y está bastante enfermo, ambos saben que la muerte es inminente pero no hablan de ello.